Siete impactos de bala acabaron con la vida del conocido dirigente sindical de Construcción Civil del valle Chicama, Santos Oliveros Mendoza. El hecho de sangre ocurrió alrededor de las cuatro de la tarde en el concurrido coliseo deportivo Manco Cápac de la localidad de Paiján.
La víctima, según fuentes policiales, estuvo participando de una tarde deportiva al que fue invitado para arbitrar algunos encuentros de fulbito. Luego se tomó un descanso, justo detrás de uno de los arcos del campo, sin presagiar que allí sería atacado por dos desconocidos que ingresaron al recinto deportivo y le quitaron la vida.
La policía investiga el móvil del asesinato.
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